不斷更新/方濟各靈柩抵聖母大殿 將閉門下葬

El Papa Francisco falleció a la edad de 88 años el 21 de abril. Su funeral se llevará a cabo en la Plaza de San Pedro en Roma a las 10 de la mañana del 26 de abril (4 de la tarde en horario de Taiwán).

El mundo entero se encuentra de luto por la pérdida de una figura tan amada y respetada como lo fue el Papa Francisco. A sus 88 años, su vida se ha convertido en un ejemplo de amor, humildad y compasión para todos nosotros.

Nacido en Argentina en 1933, Jorge Mario Bergoglio fue elegido como el primer Papa latinoamericano en 2013. Durante su papado, se ha destacado por su enfoque en los problemas sociales y su llamado a una iglesia más inclusiva y comprometida con los más necesitados.

Su partida ha dejado un gran vacío en el corazón de millones de fieles en todo el mundo. Sin embargo, su legado vivirá por siempre en los corazones de aquellos que han sido tocados por su bondad y dedicación a servir a los demás.

El funeral del Papa Francisco se llevará a cabo en la Plaza de San Pedro, una de las plazas más emblemáticas de Roma, a las 10 de la mañana del 26 de abril. Será un momento de tristeza y reflexión para todos los que se reúnan para despedir a este gran líder religioso.

Pero más allá de la tristeza, debemos recordar y celebrar la vida del Papa Francisco. Un hombre que dedicó su vida a seguir los pasos de Jesús y a difundir su mensaje de amor y paz. Un hombre que rompió barreras y abrazó a todos, independientemente de su origen o creencias.

Su impacto en el mundo no puede ser medido en palabras. Desde su llamado a la protección del medio ambiente hasta su defensa de los derechos de los migrantes, el Papa Francisco ha sido una voz valiente y poderosa en un mundo que muchas veces se olvida de los más vulnerables.

Su partida nos recuerda que la vida es frágil y que debemos aprovechar cada momento para hacer el bien y marcar la diferencia en el mundo. El Papa Francisco nos deja un legado de amor, esperanza y compasión, y es nuestra responsabilidad continuar su obra y seguir sus enseñanzas.

Que su alma descanse en paz y que su ejemplo nos inspire a ser mejores cada día. El mundo ha perdido a un gran líder, pero su espíritu seguirá vivo en cada uno de nosotros. Gracias, Papa Francisco, por todo lo que nos has enseñado. Tu luz seguirá brillando en la eternidad.