La Administración Federal de Aviación de Estados Unidos (FAA) anunció el 8 de enero que más de 2600 aviones Boeing 737 necesitarán ser inspeccionados debido a preocupaciones sobre la posible falla de las máscaras de oxígeno en caso de emergencia. Según informes de la Agencia France-Presse, la directiva de aeronavegabilidad de la FAA entrará en vigor de inmediato y afectará a más de 2600 aviones registrados en Estados Unidos. El objetivo de esta directiva es asegurar que los generadores de oxígeno en las unidades de servicio de pasajeros (PSU) en ciertos aviones Boeing estén en la posición correcta. Según Bloomberg News, la directiva de aeronavegabilidad de la FAA se aplica a los modelos 737-8, 737-9, 737-8200, 737-700, 737-800 y 737-700C.
Esta medida se toma como precaución para garantizar la seguridad de los pasajeros en caso de una emergencia en vuelo. La FAA ha tomado medidas proactivas para garantizar que los aviones cumplan con los estándares de seguridad más altos y que los pasajeros estén protegidos en todo momento.
La inspección de los generadores de oxígeno en las unidades de servicio de pasajeros es esencial para garantizar que funcionen correctamente en caso de una despresurización de la cabina. En caso de una emergencia, estas máscaras de oxígeno son vitales para la supervivencia de los pasajeros y la tripulación. Por lo tanto, es crucial que estén en la posición correcta y funcionen correctamente.
La directiva de aeronavegabilidad de la FAA es una medida de precaución y no se han reportado incidentes relacionados con este problema en particular. Sin embargo, la seguridad de los pasajeros es siempre la máxima prioridad y la FAA está tomando medidas para garantizar que se cumplan los más altos estándares de seguridad.
Boeing ha sido notificado de esta directiva y está trabajando en estrecha colaboración con la FAA para llevar a cabo las inspecciones necesarias en los aviones afectados. Se espera que estas inspecciones se completen en un plazo razonable y que no afecten significativamente a los vuelos.
La FAA ha asegurado al público que no hay razón para preocuparse y que los aviones afectados seguirán siendo seguros para volar mientras se realizan las inspecciones. Se recomienda a los pasajeros que sigan las instrucciones de la tripulación en caso de una emergencia y confíen en que se han tomado todas las medidas necesarias para garantizar su seguridad.
En resumen, la directiva de aeronavegabilidad de la FAA es una medida de precaución para garantizar la seguridad de los pasajeros en vuelo. La FAA y Boeing están trabajando juntos para llevar a cabo las inspecciones necesarias y garantizar que se cumplan los más altos estándares de seguridad. Los pasajeros pueden estar seguros de que se han tomado todas las medidas necesarias para garantizar su seguridad y que pueden seguir confiando en la seguridad de los vuelos en aviones Boeing 737.